Puente de Piedra de Logroño
El puente de piedra es uno de los símbolos de la ciudad, apareciendo en su escudo y siendo el lugar de entrada del Camino de Santiago a la ciudad.
Fue el primer puente de piedra logroñés; construido en el siglo XII por don Juan de Ortega, clérigo y arquitecto, y que constaba de diecisiete arcos y dos castillos convirtiendo a Logroño en una plaza fuerte y amurallada que obstentaba todo el Ebro por foso y dos torres por delante, las cuales han subsistido en pie hasta el siglo pasado y en cuyas almenas medievales ondeó hasta la mitad del siglo XVII la bandera del real cuerpo de batallones de marina.
El puente de piedra hubo de sufrir más de trescientos años los ataques de las aguas, cuando el Ebro se ensoberbecía en crecidas increíbles que dejaban malparada su fortaleza. Hasta 1736 no se encontró forma de evitar que las crecidas lo arrasasen, y para ello se construyó un canalillo con pretensiones de río que partiendo de la llamada "presa de Valvuena" descargara de parte su caudal al Ebro y no amenazase el Puente canal que el ingenio riojano bautizó con el nombre de "Ebro chiquito".
Hasta que se derruyó en el siglo pasado por el mal estado en que se encontraba, dando su derribo ocasión a la desgracia lamentable del hundimiento del puente de barcas provisional y del pintoresquismo encantador de la rusticidad, del "puente de madera", el puente de Piedra fue ruta de toda clase de guerreros.
ENLACES DE INTERÉS
Ayuntamiento de Logroño.
Comentarios
Publicar un comentario